jueves, 29 de noviembre de 2012

Historia de una reforma (XXXII): La entrada de la casa

Una de las cosas que llevábamos mucho, mucho tiempo queriendo hacer es el frente de la casa.  Y es que las piedras victorianas son muy monas peeeero, cuando los yerbajos crecen entre ellas y los tienes que andar cortando cada mes no es tan agradable. :-(

Después de mucho buscar encontramos un constructor que vino, vio y nos dio una cuota que no implicara rehipotecar la casa o empezar a trabajar por las noches haciendo dinerillo extra. Así que Andrew empezó el Lunes de hace dos semanas y he de decir que no podría estar mas contenta con el resultado.

El frente de la casa no tiene ni color! Y, cierto es que es la primera impresión que uno se lleva de la casa...así que no podríamos estar mas contentos. :-)


1 comentario:

Cuenta, cuenta. :-D